Contacto: juventudsurversiva@gmail.com

viernes, 29 de abril de 2011

Las herejías socialistas en China

Julio A. Díaz Vázquez Rebelión

Tantear una sistematización, en una versión condensada de las experiencias que son identificables, para contextualizarlas dentro de un determinado Modelo Socialista, en los más de sesenta años transcurridos desde la fundación de la Nueva China, por convención pueden, en general, enmarcarse en dos grandes etapas: 1949-1976, y desde 1978, hasta nuestros días. Igualmente, en el primer periodo son destacables cuatro momentos distintivos, cuyos rasgos matrices revelan especificidades, continuidad o adaptación de prácticas reconocidas en los paradigmas socialistas imperantes en la época, así como el tránsito por fallidos intentos de ensayar auténticas herejías alternas al socialismo real.

Sin embargo, cualquier análisis del pasado, presente y futuro económico- político-social de China, para situarse en terreno objetivo no puede obviar, al menos dos factores. El primero, lo constituyen los más de cuatro milenios de historia escrita que acumula su muy especial civilización, lo que la hace una de las de mayor continuidad histórica en la aldea global que ya es el planeta Tierra. El otro, el materialismo histórico – asociado a la obra filosófico-económica de Karl Marx1 --, es el resultado del desarrollo cultural de la Europa Occidental; su trasplante a China dio lugar a una apropiación herética en una sociedad de raíz campesina. El mérito de hacer que el campo rodeara a la ciudad le correspondió a Mao Zedong.


Así, un referente previo a la proclamación (1/10/1949) de la RPCh resultó la primera sesión plenaria (9/1949) del Consejo Consultivo Político del Pueblo Chino (CCPPCh) con la presencia de más de 600 delegados. Instancia que formó inicialmente una especie de Frente Popular con representantes de las minorías nacionales, de los partidos ((8) políticos democráticos2, del Ejército Popular de Liberación (EPL), organizaciones populares, de las distintas regiones del país, chinos de ultramar, así como personalidades patrióticas invitadas a título personal. Este cónclave aprobó un Programa Común que desempeñó el papel de Constitución hasta la aprobación, en 1954, de la Carta Magna de la Nueva China.

Es oportuno señalar que en los inicios de la década de 1940, en uno de los trabajos en que Mao analizó la situación específica de la lucha revolucionaria en China, avanzó el concepto que denominó Nueva Democracia. Argumentó el largo proceso (20-30 años) que para China significaba la perspectiva socialista, dado el carácter semicolonial, semifeudal3 y la necesidad de superar el gran retraso económico. De este modo, la etapa de la reconstrucción se apoyó en un programa político basado en una alianza interclasista constituida por obreros, campesinos, pequeña burguesía y la burguesía doméstica no vinculada con el invasor nipón ni al capital extranjero. Asociación simbolizada en las cuatro pequeñas estrellas de la bandera nacional.

II

Esa idea soslayó establecer un régimen del tipo de dictadura del proletariado y tampoco se aproximó a las democracias populares surgidas en el ámbito centro-europeo. Así, 1949-1952 transcurrió bajo la fórmula de la Nueva Democracia que, en estricto sensu, es identificable con la fase democrático-burguesa en el proceso revolucionario socialista de China. Además, en el trienio fue estructuró un programa con el propósito de lograr la recuperación económica en breve tiempo. Para finales de 1952 las medidas de reactivación y los cambios introducidos en la economía industrial, agrícola y en el comercio rindieron frutos. Se logró que las principales manufacturas y producciones agropecuarias superaran los niveles máximos alcanzados antes de la guerra.

Asimismo, en 1950 se aplicó una reforma agraria que eliminó a los grandes señores feudales y propietarios rurales ricos. Para fines de 1952 ya se habían distribuidos 43 millones de ha. que beneficiaron a unos 300 millones de campesinos pobres. Fueron confiscados los capitalistas que colaboraron con los ocupantes japoneses, el burocrático, las industrias y comercio cuyos propietarios huyeron del país. A la vez, medidas de nacionalización se le aplicaron a las empresas extranjeras, bancos ferrocarriles y grandes capitalistas nacionales.

En las actividades artesanales se estimuló la formación de cooperativas; se favoreció el ordenamiento de un mercado nacional único, mediante la integración de pequeños comerciantes, vendedores ambulantes y cooperativas comerciales. Al mismo tiempo, fue combatió con firmeza la especulación, el juego, prostitución, así como establecidos rígidos controles de precios.

Una peculiaridad específica de China, en relación con otros procesos socialistas, lo constituyó el peso relativo en la producción de bienes de amplio consumo popular que poseían los pequeños y medianos empresarios capitalistas. A este sector le fueron otorgadas ciertas libertades de maniobra; se asociaron sus producciones a los requerimientos estatales, a través de la compra de los productos, suministros de materias primas, financiamientos, participación en los beneficios pero, manteniendo los dueños la dirección de sus actividades.

Por otra parte, la unificación territorial continental (excepto en los enclaves coloniales de Hong Kong y Macao) dotó a China, por primera vez, en cientos de años, de un único poder central. Igualmente, a la irrupción de una nueva clase de campesinos propietarios, susceptibles de comprar, vender y alquilar sus tierras, se sumaron los logros evidentes en todas las esferas de la sociedad que sirvieron para consolidar y afianzar la base popular del nuevo poder constituido en el país.

Además, las finanzas fueron reformadas con la fundación del Banco Popular de China (BPCh); confiriéndosele a esta institución todos los derechos de emisión de papel moneda, la asignación y control financiero, así como el curso monetario del país. Quedó instituido el signo legal de la moneda de la nación con la introducción del renmimbi (moneda del pueblo) que se subdividió en la denominación de yuan (billete o metálico monetario principal), acompañado de otras fracciones, jiaos y fenes en acuñaciones metálicas.

De este modo, al concluir 1952 la RPCh había estructurado una economía mixta; integrada por un sector estatal (socialista), el cooperativo (capitalista-estatal), privada, el individual artesano y el campesino. Aunque, persiguiendo los objetivos propuestos de construir el socialismo tuvo prioridad todo lo que tendiera a fortalecer el desarrollo de las ramas estatales; entendidas como garantes del futuro y condición indispensable para reformar las demás sectores de la economía. En la práctica, el Programa Común había recogido las direcciones principales para el enrumbar hacia el socialismo en la Nueva China.

III

Sin embargo, los éxitos obtenidos en la reconstrucción del país en el trienio 1949-1952 dieron fundamentos para que (8/1952) el propio Mao asumiera que la transición al socialismo era posible resolverla en una etapa de 10-15 años. Así, en 1953-1957, fue puesto en marcha el I Plan Quinquenal de Desarrollo Económico-social de China. Se inspiró en la experiencia soviética adoptando, entre otras categorías: planificación centralizada de la economía, nacionalización de la industria y la propiedad estatal de los medios fundamentales de producción.4

El Plan se orientó a la rápida industrialización del país, con especial énfasis en la industria pesada y la socialización de la agricultura; esta última tuvo tres ejes: autosuficiencia alimentaria, generar excedentes para la acumulación productiva y facilitar mano de obra para el desarrollo industrial. Otro objetivo político-económico contempló la eliminación gradual de la propiedad privada, con trato diferenciado a seguir en el campo y la ciudad.

En 1953-1956 fue nacionalizado el sector privado urbano; una gran mayoría de propietarios se transformaron en rentistas públicos. El Estado fijó las metas productivas, suministró materias primas y distribuía la producción; en contrapartida los empresarios recibían bonos que rentaban determinados tipos de interés. Así, a fines de 1956 más de 60 mil instalaciones fabriles y 280 mil comercios mixtos (privados-estatales) operaban nacionalmente; otros 20 mil pequeños negocios y 2 millones de comercios chicos fueron organizados en cooperativas.

El sector agropecuario, desde 1953 fue transformándose al pasar de los equipos de ayuda mutua (grupos de 6-7 familias) que usaban de conjunto las herramientas, animales y suelos, a formas más avanzadas de cooperación. La tierra, equipos, el trabajo y otros recursos eran compartidos, aunque conservando la propiedad de los medios de producción. En 1956 el 96% de los campesinos y el 90% de la tierra cultivable se agruparon en cooperativas de producción. Entre 1952-1957 los cambios de signo (tabla 1) en las formas de propiedad fueron significativos.

Tabla 1

TRANSFORMACIÓN DE LA ECONOMÍA CHINA EN %

Agrupación 1952 1957

Sector estatal 19 33

Sector mixto 3 8

Sector cooperativo - 56

Sector privado 78 3

Total 100 100

Fuente: Confeccionada a partir de Adler Salomón, La economía China, Fondo de Cultura Económica, México, 1957, Págs. 80-115.


Pero, el sector agrario chino no escapó a la fórmula que ha estado presente en las experiencias socialistas conocidas en las relaciones campo-ciudad: vender caro - comprar barato. Además, soportó elevados impuestos; se programó que aportara el 80% del fondo inversionista. A la vez, la densidad demográfica obstaculizó la mecanización agrícola, necesaria para la rápida elevación de la productividad del trabajo.

Por otro lado, el Plan se benefició de la amplia y multifacética colaboración con los países socialistas, en especial con la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Asumió la construcción del núcleo central de las obras (156) para el desarrollo de la industria pesada; envió unos 3 mil especialistas; recibió en Moscú 12 mil estudiantes y facilitó abundante documentación científico-técnica. Aunque los recursos inversionistas externos rozaron solo el 3% del total de lo invertido. Los intercambios comerciales con el bloque de Europa Oriental y la URSS, desde 1954, alcanzaron el 80%. Factor que sirvió para contrarrestar las restricciones impuestas por los socios comerciales occidentales, así como el positivo papel que desempeñó implantar el monopolio del comercio exterior.

El Plan 1953-1957 arrojó resultados innegables. La renta nacional (RN) creció a un ritmo anual cercano al 9%; la producción industrial al 18% y la agricultura al 4.5%. La estabilidad de los precios proporcionó una sensible mejoría en el nivel de vida de la población. No obstante, los éxitos no estuvieron exentos de costos sociales y económicos, entre otros, industrialización sin desarrollo urbano, desproporciones en los ingresos citadinos y rurales, etc. Así, en el VIII Congreso del PCCh (9/1956), entre sus documentos, aprobó las líneas generales para el II Plan Quinquenal (1958-1962). En lo esencial, mantuvo el mismo rumbo estratégico seguido, el ya ensayado modelo económico soviético.

Sin embargo, según diversos sinólogos palpitaban en la cúpula del PCCh sutiles diferencias. Una favorecía las experiencias probadas; la otra abogaba por acelerar el proceso de cambios económico-sociales apoyado en las propias fuerzas. Mao y otros dirigentes serían los abanderados de esta segunda ruta. Posturas que es factible deducirla de varios trabajos de Mao, entre ellos, Sobre las diez grandes relaciones (25/4/1956); plantea de forma abierta que la construcción socialista se ajuste a las condiciones específicas de China; interpretándose como el abandono oficial del modelo soviético; sobre el tratamiento correcto de las contradicciones en el seno del pueblo (27/2/1957); y posteriormente, Que cien flores se abran y que compitan cien escuelas ideológicas5.

IV

Así, 1958 marcó un nuevo derrotero en el devenir de la sociedad china, con el paso a la línea propugnada por Mao. Surgió una nueva ortodoxia (herejía) socialista; la consigna que el desarrollo económico quedara concentrado en veinte años en un día se materializó en la política del Gran Salto Adelante; generalizó las Comunas Populares. La política ocupó el puesto de mando. En (4/1958) 43 mil campesinos de la provincia de Hunan, integrantes de 27 cooperativas agrícolas, decidieron agruparse para cultivar mejor la tierra, construir industrias locales, cavar canales de riego, trazar caminos, levantar escuelas, etc.; en una palabra, avanzar hacia rápidos progresos en las áreas económico-sociales.

La revolucionaria asociación fue bautizada con el nombre de Sputnik. El (7/81958) fueron publicados sus estatutos; el (29/8/1958) el Pleno del Comité Central del PCCh adoptó una resolución histórica que festejó el nacimiento, y deseó la multiplicación de las comunas populares. Antes de fin de año unas 740 mil cooperativas agrícolas dieron paso a 26 mil comunas. Cada una agrupó, por término medio, unas 5 mil familias. En lo orgánico y estratégico, parecieron constituir unidades básicas de organización del Estado y la sociedad de China. Su accionar abarcó, de modo integral, aspectos económicos, sociales, políticos e incluso militares.

Las comunas constituyeron estructuras cercanas a Estados en miniatura. El régimen financiero estaba dominado desde el Gobierno Central. Pero, las asociaciones controlaban las relaciones con el exterior, así como el sector nacionalizado: depósitos de maquinarias, talleres de reparaciones, pequeñas industrias auxiliares, etc. En las instancias inferiores, fueron delegadas responsabilidades en las brigadas (prefecturas) que supervisaban los equipos de base, esto es las municipalidades.

La planificación y el control centralizado de las empresas se redujeron hasta un 27%; la mayoría de las unidades productivas quedaron sujetas a las autoridades locales, regionales o provinciales. La estrategia consistió en que el crecimiento económico-social acelerara la revolución; todos los sectores de producción tendrían misiones iguales, con atención especial a la agricultura. Los objetivos de inversión no se centraron en grandes unidades; se enfatizó en las tendencias igualitarias en las fábricas – y fuera de ellas -, para conjurar el surgimiento de diferencias en lo social entre los obreros, campesinos y otros grupos de la población. Primó el principio de comer de la olla común y se debilitaron los mecanismos monetario-mercantiles.

En tanto, el desempeño económico de 1958-1960 ofreció rasgos dispares al tratar de conjugar elementos de racionalidad económica, y por otro lado, sustentar las medidas aplicadas en la economía sobre pilares subjetivos, ideológicos y movilizativos. El II Plan Quinquenal resultó un fracaso. El balance del Gran Salto indica que redujo el ritmo de crecimiento de la RN hasta un 3% anual; la producción agrícola cayó en un 4%; se agudizaron las diferencias estructurales de la economía6. En lo humano, quedó la tragedia de los dilates económicos y fenómenos naturales, con su secuela de hambrunas y un saldo de muertes estimado en 30 millones de personas.

Las deformaciones creadas por el Gran Salto Adelante fueron sometidas a rectificación en 1961-1965 bajo la consigna de reajuste-consolidación-completamiento y elevación, condensadas en el llamado a caminar sobre las dos piernas. Se propugnó un crecimiento más equilibrado de la industria y la agricultura. El igualitarismo imperante en las comunas se debilitó a favor de mayores incentivos materiales a la producción; los campesinos recibieron autorización para explotar parcelas individuales.

La planificación fue reforzada, fueron reducidos los tamaños de las comunas, aumentando su número hasta las 74 mil; estimuladas las actividades anexas personales como la artesanía. Especial énfasis se puso en el fomento de la ciencia, la tecnología, la modernización, el incremento de la productividad, los sistemas de incentivos, los controles financieros y contables en las empresas.

Así, la restauración moderada ejecutada propició un notable auge económico. Entre 1963-1965 la RN mostró un elevación cercana al 15%; la producción agrícola, en un 11%; la industria, en un 18%. Por primera vez, la industria ligera aventajó el ritmo de incremento de la pesada, aunque las disponibilidades de bienes de consumo no superaban los de 19577. El pragmatismo que parecía imponerse en el ordenamiento de la economía tenía de cabezas visibles a Liu Shao-qui, Presidente de la República; Deng Xiaoping, Secretario General del PCCh8; y Zhou En-lai, Primer Ministro.

Sin embargo, entre 1962-1965, Mao, personalmente y en los viajes que realizó por el interior del país, emprendió una sutil crítica al desempeño económico en curso, en particular en la agricultura. Enfiló las diatribas contra la cierta autonomía concedida al sector y al cultivo de las parcelas individuales por los campesinos. Denunció una supuesta facción burguesa en el PCCh que procuraba volver al capitalismo, al apoyar, entre otras razones, el empleo de medios y palancas mercantiles e incentivos materiales, descalificando las políticas económicas aplicadas. Propugnó un socialismo perfecto que preservara la teoría y pureza del marxismo; y situó la lucha de clases en el centro político-económico.

El despliegue de lo que sería la búsqueda de un tercer modelo a través de una segunda opción ortodoxa (herejía) socialista, la Gran Revolución Cultural Proletaria, la dio el dazibao (periódico mural) colgado en la pared de la Universidad de Beida (Beijing, 6/1966). Se llamó Cultural por iniciarse con la crítica en la esfera de la cultura; además, aportaría, según el proyecto ideado por Mao, un nuevo y resplandeciente socialismo. En la puerta del Comité Central del PCCH (5/8/1966) Mao colocó su propio dazibao, cuyo título bombardeen los estados mayores resultó todo un programa. Rápidamente se desató una virulenta campaña contra los cuadros del Partido y dirigentes estatales acusados de defender la línea capitalista. Fueron reprimidos, entre otros líderes, Peng Zhen, Luo Ruiquing, Lu Dingyi, Yang Shangkun, Liu Shao-qui y Deng Xioaping9.

La punta de lanza de la ofensiva de las masas destapada por la revolución cultural, recayó en los guardas rojos, destacamentos de la juventud seducidos por el culto a la personalidad de Mao. El radicalismo doctrinal izquierdista instaba a combatir lo antiguo y burgués. A fines de 1967, una vez borrada la oposición dentro del Partido, y consolidados los dictados y el lugar protagónico de Mao, se procedió a la reordenación social -- proceso en el que ejerció influencia la intervención de las tropas del ((8/1968) Pacto de Varsovia en Checoslovaquia --, al ajuste de la economía a parámetros de naturalización y suprimir elementos monetarios-mercantiles. Los guardias rojos fueron desmovilizados; la gran mayoría fue enviada al campo.

La economía sufrió un duro retroceso de 1966-1968. La planificación fue desarticulada, los comités de fábricas del Partido desplazaron a los gerentes y los resortes monetarios e incentivos materiales fueron liquidados. Los vínculos empresariales se naturalizaron y las relaciones de mercado se anularon en la práctica. La agricultura retornó al colectivismo de las comunas; las áreas privadas cultivadas disminuyeron del 15% al 5%. Los mercado-bazars y ferias libres casi desaparecieron. Pero, resultó paradójico que la industria rural fuera estimulada como complemento de las actividades agrícolas.

Tampoco faltó en este curso del desarrollo económico-social de China la glorificación de las virtudes, en mucho inspirado en las experiencias del período heroico de Yenan; y se entronizó el intento de crear el llamado modelo maoísta; encarnación ideal de un socialismo austero. Esta peculiar concepción social justificó el envío de intelectuales, profesionales y citadinos al campo para aprender de las fortalezas del proletariado. Modelo que la (ultra) izquierda socialista identificó como opuesto a la ortodoxia del proyecto europeo del socialismo real.

El desempeño económico sufrió la caída de la producción de casi un 14% en 1967 y de un 5% en 1968. La agricultura decreció cerca de un 3%; solo los ramos vinculados con la defensa y la industria espacial mostraron índices positivos. China explotó con éxito su primera bomba atómica en 1964; y en 1970 puso en órbita el primer satélite. El IV Plan Quinquenal (1968-1972) intentó relanzar las tareas económicas: la tasa de acumulación fue del 37%; el incremento del producto bruto interno (PIB) se fijó en el 6%. El crecimiento medio de la producción industrial mostró los males que aquejó a la economía entre1956-1975. En 1953-1957 la industria pesada creció un 25% y la ligera un 13%; en 1975 fue de un 1% y un 2%. El PIB en 1965-1976 aumentó en un 5%.

El V Plan Quinquenal (1973-1977) siguió la tónica del anterior, al intentar estabilizar el desarrollo económico del país y paliar la irracionalidad del remolino tormentoso entronizado en los años de la revolución cultural. En este tiempo se trató de estimular la producción combinando en algo la sensatez económica con la movilización social en torno a los objetivos productivos.

Finalmente, pretender un juicio pleno de lo que significaron las concepciones de Mao, a partir de 1958, en lo que respecta a la formación de un modelo de socialismo chino que se convirtiera en paradigma mundial, resulta una meta que rebasa los propósitos de este trabajo. Además, cuanta el agravante de la ausencia de una valoración científico-académica integral, que tenga en cuenta, ante todo, los involucrados que vivieron y soportaron en carne propia las consecuencias de aquellas gigantescas agitaciones de masas, o en la práctica, una verdadera guerra civil, y sus efectos directos en la población de China

La política en el puesto de mando se impuso como método y guía práctica para las soluciones económicas durante el Gran Salto. Más tarde, al tomarse como base la lucha de clases, empeñarse en la revolución, promover la producción; generalizan en las ciencias sociales los criterios políticos. Primó la tendencia a reducir, absolutizar y llevar a esquemas carentes de contenido los temas de la economía política y la problemática social; ejemplo, el Libro Rojo con citas extraídas de diversos trabajos de Mao y elevadas a verdades absolutas. En el 2006, a 40 años del inicio de la Revolución Cultural, se efectuó en Beijing un evento a puertas cerradas donde académicos y otros expertos de las ciencias sociales debatieron acerca de los sucesos político-económico-sociales entre 1966-1976. Los resultados no han sido publicados10.

No obstante, tampoco puede ignorar que China logró adelantos significativos en el desarrollo económico, e índices económicos de igualdad -- se denominó el país de las camisas azules por ir todos sus ciudadanos vestidos de ese calor --, en la educación, la salud (los médicos descalzos), así como avances en la igualdad de géneros, etc. Por otro lado, lo alcanzado en la industrialización del país se logró sin apenas urbanización, pues los miembros de los diferentes sectores laborales –campesinos, obreros y empleados – carecían de movilidad y, por lo regular, el lugar de trabajo era intransferible y vitalicio; política que privilegió al sector obrero citadino. Los campesinos en particular, estaban sujetos al hukou (permiso de residencia), que los ataba a la aldea de modo permanente.

Por otra parte, China careció en lo fundamental, entre otros elementos propios culturales, inspirado en la formación de los peculiares modelos maoístas de socialismo, de un sistema de seguridad social estructurado centralmente. La empresa ofrecía trabajo de por vida, jubilación, vivienda, salud, círculos infantiles, etc. Fue bautizado como el de la garantía de los tres calderos de hierro. En el campo, primó el llamado comer de la olla común. Hoy, subsisten dudas del costo de vidas humanas – no hay cifras oficiales; las usadas, mayores que las de la II Guerra Mundial11, son estimaciones que difieren según las fuentes -- ocasionadas por los experimentos inspirados en la muy particular concepción socialista desarrollada por Mao.

Por último, no puede dejar de citarse que las nociones de Mao confirmaron que la política externa es continuación de la interna. Las razones de Estado encontraron materialización en la división geopolítica de los tres mundos: uno hegemónico, Estados Unidos y la URSS; otro, países desarrollados, incluido Japón y los socialistas; el tercero, los países – más China -- subdesarrollados. Salido a la luz pública el conflicto chino-soviético, Mao consideró que el país era el bastión de la revolución mundial, y utilizó toda clase de asociaciones, incluidas con las fuerzas más reaccionarias; en lo externo, alentó grupos políticos tan extremistas como Sendero Luminoso (en Perú); apoyó al sangriento régimen de Pot Pol, en Camboya, y mantuvo relaciones diplomáticas con el de Pinochet en Chile.

En suma, la obsesión maoísta por sentar las bases de una sociedad en revolución permanente parece confirmar que, todo intento de crear un sistema político-económico-social que posibilita administrar con éxito la pobreza, resulta incapaz de de generar y distribuir riqueza. Aunque no debe pasarse por alto que, en el caso especial de China, la herencia autoritaria y el culto a la personalidad que asumió Mao está unida a un legado histórico de más de 2 mil 200 años.

NOTAS

1.- El Modelo Socialista Soviético (1930-1991) construyó y dejó de herencia un instrumental metodológico infalible que elevó a categoría de ciencia social que denominó marxismo-leninismo. Como otras categorías político-económico-filosóficas asociadas a las teorizaciones socialistas como sociedad superior al capitalismo, reclaman un reanálisis donde lo apologético sea separado de lo verdadero científico. El Modelo que el Viejo Topo relegó al museo de la historia, probó que todo régimen social siempre necesita de sicofantes de la ciencia.

2.- Además del PCCh los llamados partidos democráticos son: Liga Democrática de China (1941), Comité Revolucionario del Kuomintang de China (1948), Asociación Democrática de China (1945), Asociación para el Fomento de la Democracia (1945), Partido Democrático de Campesinos y Obreros de China (1930), Sociedad 3 de Septiembre (1944), Liga Democrática y Autonomía de Taiwán (1947), Partido Zhigongdand de China (1925).

3- No es ocioso recordar que el feudalismo en China, aunque coexistió con relaciones de mercado desarrolladas, no generó una burguesía doméstica como en Europa; clase que terminó desplazando del poder a la nobleza. Especificidad poco estudiada – escapa a los límites de este trabajo -; y que llama a un reexamen de lo señalado por Lenin: el mercado engendra cada día, cada hora, cada minuto capitalismo.

4.- Para una sintética caracterización del Modelo Soviético ver: Julio A. Díaz Vázquez, La modernización económica de China: ¿otra herejía?, Revista Temas no.50-51, abril-septiembre de 2007, Págs. 65-66.

5.- Ver, Fan, K.H., La revolución cultural china, Documentos seleccionados, Ediciones Era, México, 1970, Págs. 32-40; Bettelheim, Ch.; Rossanda Rossana, Karol, K.S., China después de Mao, El Viejo Topo, Barcelona, España, 1978, Págs. 78-96.

6.- Ver: Karol, Kewes S., China, el otro comunismo, Siglo XXI Editores, S. A., México, 1967, Págs. 166-228.

7.- Ver: Díaz Vázquez, Julio A.; Regalado Florido, Eduardo, China: el Despertar del Dragón, Editorial de Ciencia Sociales, La Habana, 2007, Págs. 38-39.

8.- Deng Xiaoping, desde 1948 ocupó interinamente la secretaria general del partido. En el VIII Congreso del PCCh (9/1956) lo ratificó en el cargo. Se unió al PCCh en Francia; allí estableció vínculos con Zhou Eng-lai; vivió y trabajó en la URSS por corto tiempo; realizó la epopeya de La Larga Marcha (1934-1935), como comisario político de una unidad. En la guerra contra Japón fue de los principales comandantes del ejército. Mao lo describió como un hombre de cerebro redondo e ideas cuadradas; brilló más por su pragmatismo que por la creación teórica.

9- Ver, la síntesis del proceso en: Ríos, Xulio, China de la A a la Z, Editorial Popular, Madrid, España, 2008, Págs. 34-35; 178-181.

10.-Para un acercamiento desde diferentes óptica al desarrollo de la Revolución Cultural, ver: Karol, Kewes S, La segunda revolución China, Seix Barral, Barcelona, España, 1977. Una aproximación a esos sucesos desde una reflexión personal, ver: Deng, Rong, Deng Xiaoping y la Revolución cultural. Su hija recuerda los años críticos, Editora Popular, Madrid, España, 2006. Un análisis integral y completo en: La revolución cultural china, Macfarquhar, Roderick; Schoenhals, Michael, Editorial Crítica, Barcelona, España, 2009.

11.- Ver, para esta afirmación a, Jung Chang; Halliday, Jon, Mao, La historia desconocida, Editorial Taurus, Madrid, España, 2006.

* Julio Díaz Vázquez es profesor Consultante del Centro de Investigaciones de la Economía Internacional Universidad de La Habana


Leer Más......

Libia y la nueva división imperial de África

Mahdi Darius Nazemroaya Global Research

PRIMERA PARTE

Los planes para atacar Libia son antiguos. La maquinaria de guerra imperial de EE.UU., Gran Bretaña, Francia, Italia y sus aliados de la OTAN está involucrada en una nueva aventura militar comparable a los eventos que llevaron a las guerras contra Yugoslavia e Iraq. La maquinaria bélica se ha movilizado bajo la cobertura de “intervención humanitaria”.

De hecho, lo que han hecho el Pentágono y la OTAN es violar el derecho internacional al intervenir a favor de una de las partes en combate en Libia en una guerra civil que ellos mismos han alentado y alimentado. No han protegido a los civiles, sino que han lanzado una guerra contra el régimen libio en Trípoli y ayudan activamente al Consejo de Transición basado en Bengasi en los combates contra los militares libios.

Antes del acercamiento al coronel Gadafi, EE.UU., Gran Bretaña, Francia, y sus aliados trabajaron para desestabilizar Libia. Como han confirmado fuentes del gobierno de EE.UU., Washington intentó varias veces un cambio de régimen en Trípoli [1]. Según el general Wesley Clark, ex comandante de la OTAN, el Pentágono tuvo planes activos para lanzar una guerra contra Libia.

EE.UU. y sus aliados de la OTAN están ahora embrollados en una nueva guerra que tiene las características evidentes de las guerras e invasiones de Iraq y de la antigua Yugoslavia.


Una gran armada naval frente a las costas de Libia ha bombardeado el país durante semanas con el objetivo declarado de deponer al régimen libio. Al mismo tiempo impulsan las divisiones internas en Libia.

Esparcen desinformación sistemáticamente. Como a Sadam Hussein antes que a él, EE.UU. y la UE armaron y ayudaron al coronel Gadafi. Por ello es importante responsabilizar a EE.UU. y a la UE de las ventas de armas y el entrenamiento de fuerzas libias.

También, como en Iraq, EE.UU. patrocinó a otro dictador árabe y posteriormente lo traicionó.

Antes del acercamiento de Iraq a EE.UU., al comienzo de la Guerra Iraq-Irán, Sadam Hussein era aliado soviético y Washington le consideraba un enemigo.

El caso del coronel Gadafi es similar en muchos sentidos. Irónicamente, Gadafi había advertido sobre el cambio de régimen a los dirigentes árabes en 2008 en una reunión en Damasco bajo los auspicios de la Liga Árabe. Señaló la “mala costumbre” del gobierno de EE.UU. de traicionar a sus amigos dictadores árabes:

¿Por qué no investiga el Consejo de Seguridad de la ONU el ahorcamiento de Sadam Hussein? ¿Cómo pudieron ahorcar al dirigente de un Estado de la Liga Árabe? No hablo de las políticas de Sadam Hussein o de nuestra animosidad contra él [me refiero a los demás dirigentes árabes]. Todos teníamos nuestros desacuerdos con él. También tenemos desacuerdos entre nosotros. Nada nos une aparte de esta sala. ¿Por qué no hay una investigación sobre la ejecución de Sadam Hussein?

A todo un gobierno árabe se le asesina y se le cuelga en la horca ¿Por qué? ¡En el futuro también va a ser vuestra suerte! [Los demás funcionarios árabes reunidos comienzan a reír] ¡Por cierto!

EE.UU. combatió junto a Sadam Hussein contra Jomeini [en la Guerra Iraq-Irán]. Era su amigo. Cheney era amigo de Sadam Hussein. Rumsfeld, el secretario de defensa de EE.UU. durante el bombardeo de Iraq [en 2003], era un cercano amigo de Sadam Hussein.

Al final lo traicionaron. Lo colgaron. Incluso vosotros [los dirigentes árabes] que sois amigos de EE.UU. –no, diré más bien nosotros–, los amigos de EE.UU., Estados Unidos puede aprobar un día nuestro ahorcamiento [2].

Al terminar la Guerra del Golfo de 1991, EE.UU. alentó deliberadamente la revuelta abierta contra el régimen de Sadam Hussein, pero se contuvo y se quedó mirando mientras Sadam Hussein aplastaba las revueltas iraquíes por la fuerza.

En 2011 han hecho lo mismo contra Gadafi y su régimen en Libia. Washington y sus aliados no solo instigaron la revuelta en Libia, sino que además los rebeldes recibieron armas y asesoramiento militar.

Cuando EE.UU. y sus aliados provocaron las revueltas contra Sadam en Bagdad después de la Guerra del Golfo, EE.UU., Gran Bretaña y Fancia establecieron “zonas de exclusión aérea” sobre Iraq con el pretexto de proteger “al pueblo iraquí contra Sadam”. Durante años atacaron a Iraq sistemáticamente. Bombardearon a la República Iraquí y debelitaron sus capacidades de defensa.

Actualmente EE.UU. y sus aliados han impuesto una zona de exclusión aérea sobre Libia con el pretexto de proteger “al pueblo libio contra Gadafi”. Si desearan proteger al pueblo libio contra Gadafi, ¿por qué armaron a Gadafi para comenzar? ¿Por qué realizaron transacciones comerciales después de los disturbios contra el gobierno de 2006 y 2008 en Libia? Hay mucho más en esta narrativa, que forma parte de una marcha más amplia hacia la guerra.

Una nueva división imperial de África: La Conferencia de Londres

La Conferencia de Londres sobre Libia muestra tal como son a los miembros de la coalición formada contra Libia. Violando de forma evidente el derecho internacional, EE.UU., Gran Bretaña, Francia, Alemania y sus aliados están tomando decisiones sobre el futuro de Libia antes de cualquier cambio en el terreno [4]. La democracia es un proceso que comienza por abajo y el gobierno de Libia es un asunto interno que deben decidir los propios libios. Las decisiones no pueden tomarlas las potencias extranjeras que han sido los apoyos más acérrimos de las peores dictaduras.

Las naciones reunidas en la mesa de la conferencia de Londres no tienen ningún derecho a decidir si Gadafi debe quedarse o irse. Es un derecho soberano que solo tienen los libios. La participación en la guerra civil es una violación del derecho internacional, como lo es tomar partido por uno de los campos en esa guerra civil.

La Conferencia de Londres sobre Libia puede compararse con la Conferencia de Berlín de 1884. A diferencia de la de 1884, esta conferencia apunta a dividir el botín de la guerra de Libia, en lugar de trinchar todo un continente. Asimismo Washington, en lugar de mantenerse alejado como en 1884, es la potencia dirigente en esta nueva conferencia relacionada con los asuntos del continente africano.

La posición de EE.UU. y de sus aliados europeos occidentales está muy clara:

La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Rodham Clinton, y el secretario de exteriores británico William Hague, dirigieron las conversaciones de crisis en Londres entre 40 países e instituciones, que buscan todos una fase final orientada a detener el sangriento ataque de Gadafi contra el pueblo de Libia.

Aunque los ataques aéreos dirigidos por la OTAN contra las fuerzas de Gadafi que comenzaron el 19 de marzo no tienen el objetivo de derrocarlo, docenas de naciones acordaron en las conversaciones que el futuro de Libia no incluye al dictador en el mando.

“Gadafi ha perdido la legitimidad para dirigir, por lo tanto creemos que debe irse. Trabajamos con la comunidad internacional para tratar de lograr ese resultado,” dijo Clinton a los periodistas.

Mientras hablaba, los funcionarios de EE.UU. anunciaron que barcos y submarinos estadounidenses en el Mediterráneo habían lanzado una descarga de misiles crucero contra instalaciones libias de almacenamiento de misiles en el área de Trípoli la tarde del lunes y la madrugada del martes, el mayor ataque en días.

El ministro de exteriores alemán, Guido Westerwelle, se hizo eco de la posición de Clinton:

“Una cosa está bastante clara y hay que dejarla bien clara ante Gadafi: Su tiempo ha pasado. Debe irse,” dijo Westerwelle. “Tenemos que destruir su ilusión de que existe un camino para que parezca que no ha pasado nada si logra aferrarse al poder” [4].

La Conferencia de Londres sobre Libia, sin embargo, no solo se ocupa de Libia, sino que además presenta el programa de una nueva división imperialista de todo el continente africano. Libia, que se convirtió en un impedimento cuando Gadafi cambió de opinión, se utilizará para completar la “Unión del Mediterráneo” y como nueva cabeza de puente hacia África. Es el comienzo de los importantes pasos que emprenderán EE.UU. y la UE para purgar de África la creciente presión china.

Una nueva división imperial de África: “Operación Amanecer de la Odisea”

El nombre “Operación Amanecer de la Odisea” es muy revelador. Identifica la intención estratégica y la dirección de la guerra contra Libia.

La Odisea es un antiguo poema épico griego del poeta Homero que cuenta el viaje y rastros del héroe Odiseo de Ítaca en su vuelta a casa. El tema principal es el “retorno a casa”.

EE.UU. y las potencias imperialistas están en su propia odisea de “retorno” a África.

El proyecto también está íntimamente relacionado con los planes militares más amplios en el Sudoeste de Asia y la ofensiva hacia Eurasia, que apunta en última instancia a Rusia, China y Asia Central.

Los planes militares de Washington tienen que ver con la masa continental africana y eurasiática, es decir un súper-continente conocido como Afro-Eurasia. El control de Afro-Eurasia es el objetivo de las estrategias de EE.UU.

EE.UU. y la OTAN han provocado una guerra civil en Libia, como pretexto para sus perdurables planes de agresión militar. Se lanzó una campaña sistemática de desinformación mediática, similar a la utilizada contra Iraq de 1991 a 2003.

De hecho, los medios han mostrado el camino a la guerra en Libia como lo hicieron en la antigua Yugoslavia, Afganistán e Iraq. EE.UU. y sus cómplices también han utilizado la atmósfera de revuelta popular en el mundo árabe como una cortina de humo para insertar y apoyar sus propios planes en la Jamahiriya Árabe Libia.

El trofeo libio en el Mediterráneo

Hay un antiguo proverbio libio que dice “cuando tu bolsillo se vacíe aumentarán tus errores”. En este contexto, las tensiones internas libias no están dominadas por penurias alimentarias. Esto diferencia a Libia de países árabes como Túnez, Egipto, Yemen, Marruecos y Jordania [5]. En Libia, la falta de libertad así como una corrupción rampante han creado la oposición al régimen, la que ha sido utilizada por EE.UU. y sus aliados como pretexto para justificar la intervención extranjera.

Libia ha llegado muy lejos desde 1951 cuando logró su independencia. En 1975, el politólogo Henri Habib describió esas condiciones:

Cuando el 24 de de diciembre de 1951 las Naciones Unidas concedieron la independencia a Libia, ésta estaba considerada como una de las naciones más pobres y más atrasadas del mundo. La población de la época no era más de 1,5 millones, un 90% era analfabeta, y no tenía experiencia o conocimientos políticos. No había universidades, solo una cantidad limitada de colegios secundarios que se habían establecido siete años antes de la independencia [6].

Según Habib el estado de pobreza en Libia resultó del yugo de la dominación otomana seguida por una era de imperialismo europeo en el país [7]. Habib explica: “Se hizo todo lo posible por mantener a los habitantes árabes [de Libia] en una posición servil incapacitándolos para lograr algún progreso para sí mismos o para su nación” [8]. También explica:

El clímax de esta opresión tuvo lugar durante la administración italiana (de 1911 a 1943) cuando los libios no solo fueron oprimidos por las autoridades [extranjeras], sino también sometidos a la pérdida y privación de la mayor parte de su tierra fértil que fue destinada a colonos llevados de Italia. Los británicos y franceses que reemplazaron a los italianos en 1943 trataron de arraigarse en Libia por diversos caminos de división, para terminar por llevar al fracaso una combinación de eventos y circunstancias fuera del control de cualquier nación [9].

A pesar de la mala administración política y de la corrupción, las reservas de petróleo de Libia (descubiertas en 1959) se utilizaron para mejorar el nivel de vida de su población. Libia tiene uno de los niveles de vida más altos de África.

Aparte de sus reservas energéticas, el Estado libio ha jugado un papel importante. Las reservas energéticas de Libia se nacionalizaron después del golpe de 1969 contra la monarquía libia. Hay que señalar que esas reservas de energía son una fuente de riqueza en Libia que si se privatizara totalmente sería un lucrativo botín de guerra.

Hasta cierto punto, el aislamiento de Libia en el pasado como Estado paria también ha jugado un papel de protección. Mientras la mayor parte del mundo se ha globalizado desde un punto de vista económico, la integración de Libia a la economía global se ha retardado en un cierto sentido.

A pesar de que grandes sumas de dinero fueron robadas y derrochadas por la familia de Gadafi y sus funcionarios, también existen en Libia servicios sociales y prestaciones, como viviendas gubernamentales. También hay que señalar que nada de esto significa que no se haya establecido una reestructuración neoliberal y la pobreza en Libia, porque juegan un gran papel.

Hasta que se inició el conflicto en 2011, hubo una inmensa fuerza laboral extranjera en Libia. Miles de trabajadores extranjeros de todas partes del globo fueron a Libia en busca de empleo. Esto incluyó a ciudadanos de Turquía, China, África subsahariana, Latinoamérica, la Unión Europea Ucrania, y el mundo árabe.

El neoliberalismo y la nueva Libia: Saif Al-Islam Gadafi y el acercamiento

De 2001 a 2003, tuvo lugar un proceso de acercamiento entre Libia y EE.UU. y sus socios de la UE. ¿Qué cambió? El coronel Gadafi no dejó de ser un dictador ni modificó conducta. El acercamiento terminó con el desafío de Trípoli a sus antiguos amos coloniales. Libia se había rendido a las presiones de EE.UU. y la UE y se llegó a un modus vivendi.

Las credenciales de Gadafi como demócrata o dictador nunca constituyeron un problema. Tampoco el uso de la fuerza bruta. El verdadero tema era la subordinación.

La fuerza utilizada contra los disturbios en 2006 y 2008 ni siquiera inquietó a la UE y a Washington, que continuaron “sus negocios como siempre” con Trípoli. Incluso fuentes del gobierno de EE.UU. insinuaron que no había que poner en peligro los intereses económicos por problemas de derecho internacional o justicia; por ejemplo, BP presionó al gobierno británico en 2006-7 para que avanzara en un intercambio de prisioneros con Libia para proteger un contrato petrolero [10].

Casi de un día para otro, Libia se convirtió en un nuevo terreno fértil para las corporaciones de EE.UU. y de la UE, especialmente en sectores de la energía. Esos lucrativos acuerdos también incluyeron contratos militares de un orden de 482 millones de dólares para material militar, entrenamiento y software de miembros de la UE (incluyendo agentes químicos y biológicos) [11].

No obstante, Washington exigió dos cosas más: la imposición de un tributo imperial así como la apertura del aparato militar y de inteligencia libio a la influencia de EE.UU. Como resultado, Libia terminó todo apoyo a los palestinos y entregó a EE.UU. sus expedientes sobre grupos de resistencia opuestos a Washington, Londres, Tel Aviv y sus aliados. Esto convirtió a Libia en un “socio” en la “Guerra global contra el terrorismo”. Washington podía participar en todos los aspectos de la seguridad del Estado libio:

Aunque las sanciones de EE.UU. a Libia se levantaron en 2004 y las restricciones a la ayuda extranjera relacionadas con el terrorismo se rescindieron en 2006, el Congreso actuó para limitar la posibilidad del gobierno de Bush de proveer ayuda extranjera a Libia como medio para presionar al gobierno y al gobierno libio a fin de que solucionaran demandas pendientes por terrorismo. La certificación del gobierno de Bush de octubre de 2008 […] acabó con las restricciones permanentes sobre el suministro de ayuda extranjera de EE.UU. contenidas en la legislación de asignaciones para el año fiscal 2008 y el año fiscal 2009. Los pedidos de ayuda presentados por los gobiernos de Bush y Obama para los años fiscales 2008 y 2009, incluían el financiamiento de programas para volver a trabajar con fuerzas de seguridad libias después de “una ruptura de contacto de 35 años” con sus homólogos estadounidenses y apoyar los esfuerzos libios para mejorar las capacidades de seguridad en áreas de interés común, como control fronterizo, contraterrorismo y controles de exportación e importación [12].

Libia también opera en la banca y las finanzas globales. El Banco de la Reserva Federal de Nueva York de EE.UU. incluso otorgó 73 préstamos a Arab Banking Corporation (ABC), que es un banco que en su mayor parte es de propiedad del Banco Central de Libia, por un total de 35.000 millones de dólares [13]. Según el senador Bernard Sanders de Vermont en una queja al secretario del Tesoro de EE.UU., Timothy Geithner, y al presidente de la Reserva Federal de EE.UU., Benjamin Bernanke, el banco, casi enteramente de propiedad libia, recibió más de 26.000 millones de dólares en préstamos con una tasa de interés de casi cero de la Reserva Federal de EE.UU. que ha vuelto a prestar al Tesoro de EE.UU. a una tasa de interés más elevada [14] Arab Banking Corporation está actualmente eximida de las sanciones contra Libia y puede servir para crear un vínculo fiscal entre Wall Street y Bengasi.

Saif Al-Islam Gadafi fue vital en el proceso de apertura de Libia al comercio con Washington y la Unión Europea. En el año 2000 Saif se graduó en una universidad de Austria y se vinculó estrechamente a asociados extranjeros que se convirtieron en sus consejeros políticos y amigos.

Según se dice, el príncipe Andrew de Gran Bretaña, se convirtió en un estrecho amigo de Saif Al-Islam: tan cercano que Chris Bryant, importante político laborista, pidió en la Cámara de los Comunes británica que se separara al príncipe Andrew de su posición como enviado comercial especial al comienzo del conflicto con Libia [15].

Los consejeros occidentales de Trípoli jugaron un papel importante en la definición de la política libia. Una “Nueva Libia” comenzó a aparecer bajo Saif Al-Islam, quien presionó por la adopción de reformas económicas neoliberales al estilo del FMI.

Desde 2005-2006, comenzaron a aparecer en Libia importantes disparidades sociales y de ingresos. El Movimiento Libio de Comités Revolucionarios fue desbandado en gran parte por Said Al-Islam. Si el Movimiento de los Comités hubiese seguido existiendo, es muy probable que hubiera tratado de impedir la escalada del actual conflicto.

Además, Saif Al-Islam fue a Londres y estableció lazos en Gran Bretaña con Noman Benotman, ex dirigente del Grupo de Combate Islámico Libio (LIFG) [16]. Se hizo amigo de Benotman.

Apoyados por Said Al-Islam, Benotman y Ali Al-Sallabi, un ciudadano libio residente en Qatar (que estaba en la lista de terroristas de Trípoli), negociaron una tregua entre el LIFG y el gobierno libio.

También vale la pena señalar que todos los ministros y embajadores que desertaron o abandonaron Libia fueron seleccionados por Saif Al-Islam.

Como en el caso de la antigua Yugoslavia en los años noventa, las reformas neoliberales aplicadas en Libia crearon disparidades sociales y de ingresos que por su parte contribuyeron a la inestabilidad política.

Acercamiento con Trípoli y extorsión imperial

A fines de 2008, el gobierno de EE.UU. logró que Trípoli pagara lo que era equivalente a un “tributo imperial”. Libia capituló y aceptó un acuerdo injusto de reparación con Washington. Se llamó “Acuerdo de Ajuste de Demandas entre EE.UU. y la Gran Libia Árabe Popular Socialista”. Según el acuerdo Libia concedería 1.300 millones de dólares a Washington, mientras Washington daría a los libios 300 millones de dólares. El Artículo 4 del anexo del acuerdo declara:

Una vez que las contribuciones a la Cuenta del Fondo lleguen a la suma de 1.800 millones de dólares, la suma de 1.500 millones de dólares se depositará en la Cuenta A [la cuenta de EE.UU.] y la suma de 300 millones de dólares se depositará en la Cuenta B [la cuenta de Libia], que en ambos casos constituirá el recibo de recursos bajo el Artículo III (2) del Acuerdo [17].

A pesar de todo esto, Libia ha seguido siendo un país relativamente rico. En 2010, Trípoli incluso hizo una oferta de comprar una parte de British Petroleum (BP), una de las mayores corporaciones del mundo [18]. La Compañía Nacional de Petróleo de Libia también sigue siendo una de las mayores compañías petroleras del mundo.

Incluso con los lucrativos acuerdos que resultaron del acercamiento, EE.UU. y la UE no olvidaron el objetivo de impulsar sus beneficios y su control. Las potencias de la UE y Washington simplemente esperaron la oportunidad adecuada. Nunca abandonaron los planes para apoderarse de Libia y del sector energético libio. Washington y Europa Occidental tampoco podían aceptar nada menos que un gobierno títere hecho y derecho en Libia.

Agitación y la reacción de Gadafi

Incluso con el acercamiento a Trípoli, EE.UU. y sus socios de la UE siguieron cultivando vínculos con personajes y organizaciones de la “oposición” con el fin de implementar un cambio de régimen en alguna fecha futura. Por eso el Frente Nacional de Salvación de Libia ha estado sobre todo activo en Washington. En boca de un oportuno informe del Servicio de Investigación del Congreso (CRS) del 18 de febrero de 2011:

La Conferencia Nacional por la Oposición Libia (una organización que engloba a grupos opositores encabezados por el NLSF […] y organizadores basados en Internet llamaron a que un “día de ira” tuviera lugar el 17 de febrero. Eventos similares habían sido organizados por grupos contrarios al gobierno en muchos otros países en Medio Oriente y el Norte de África durante el mes anterior. El 17 de febrero [2011] cientos de manifestantes salieron a las calles en Bengasi y en otras ciudades cercanas [19].

El coronel Gadafi ha gobernado Libia bajo una dura dictadura que ha utilizado sistemáticamente la violencia y el miedo. Sin embargo, el nivel de violencia que ha puesto a Libia en un estado de agitación se ha distorsionado [20]. Muchos de los informes iniciales que salieron de Libia a principios de 2011 tampoco se verificaron y en muchos casos fueron engañosos. Esos informes tienen que estudiarse con mucho cuidado. Según el mismo informe del CRS preparado para el Congreso de EE.UU., los informes iniciales provinieron todos de “informes de medios locales [libios], secuencias de vídeo de aficionados y anécdotas e informes de organizaciones de derechos humanos y grupos de oposición en el exilio” [21].

Los objetivos de Gadafi son preservar su régimen y no destruirlo. Después de que Gadafi se dio cuenta de la creciente amenaza extranjera dirigida contra su régimen, limitó generalmente el uso de la fuerza. El régimen en Trípoli no quería dar más excusas a EE.UU., la UE y a la OTAN para una intervención militar en Libia.

Gadafi mostró moderación con el fin de preservar su dictadura. El régimen libio sabía perfectamente que una sangrienta guerra civil se utilizaría como justificación para una intervención con un pretexto humanitario. Por eso Gadafi optó por tratar de negociar donde fuera posible en lugar de usar la fuerza. El uso de la violencia no favorece al régimen libio o a Libia, sino que funciona a favor de EE.UU., y los Estados de la UE.

NOTAS

(1) Christopher M. Blanchard y James Zanotti, “Libya: Background and U.S. Relations,” Congressional Research Service February 18, 2011, p.12; la fuente citada es la siguiente: Joseph T. Stanik, El Dorado Canyon: Reagan’s Undeclared War with Qaddafi, (Annapolis, Md.: Naval Institute Press, 2003); Bernard Gwertzman, “Shultz Advocates U.S. Covert Programs to Depose Qaddafi,” The New York Times, April 28, 1986; and Clifford Krauss, “Failed Anti-Qaddafi Effort Leaves U.S. Picking Up the Pieces,” The New York Times, March 12, 1991.

(2) Muamar Gadafi, discurso en la 20ª Cumbre de la Liga Árabe en Damasco (Dirección:Twentieth Arab League Summit, Damascus, Syria: March 29, 2008).

(3) David Stringer, “Top envoys agree Libya’s Moammar Gadhafi must step down but don’t discuss arming rebels,” Associated Press (AP), March 29, 2011.

(4) Ibíd.

(5) Esto no significa que los temas en esos países árabes sean exclusivamente de la vida diaria económica, porque la libertad personal y el régimen corrupto son también importantes motivaciones para la cólera pública en las respectivas sociedades árabes de los Estados mencionados. Lo que esto significa es que el tema del sustento económico es un factor importante en esas protestas. También, se informó de que las protestas en Libia de 2008 estuvieron vinculadas al desempleo, pero los problemas económicos no son la fuerza impulsora de los eventos que tienen lugar en Libia.

(6) Henri Pierre Habib, Politics and Government of Revolutionary Libya (Montmagny, Québec: Le Cercle de Livre de France Ltée, 1975) p.1.

(7) Ibíd.

(8) Ibíd.

(9) Ibíd.

(10) Blanchard and Zanotti, “Libya: Background and U.S.,” Op. cit., pp.12-13.

(11) European Union, “Twelfth Annual Report According to Article 8(2) of Council Common Position 2008/944/CFSP Defining Common Rules Governing Control of Exports of Military Technology and Equipment,” Official Journal of the European Union, vol. 24 (C9) (February 13, 2011): pp.160-162;

(12) Blanchard and Zanotti, “Libya: Background and U.S.,” Op. cit., pp.13-14.

(13) Donal Griffin and Robert Ivry, “Libya-Owned Arab Banking Corp. Drew at Least $5 Billion From Fed in Crisis,” Bloomberg, April 1, 2011.

(14) Bernard Sandards, Letter to Ben S. Bernanke, Timothy Geithner, and John Walsh, March 31, 2011: .

(15) British Broadcasting Corporation (BBC) News, “Duque de York debe perder puesto comercial, dice parlamentario laborista”, February 29, 2011.

(16) Norman Benotman fue quien organizó la defección de Musa Al-Kusa a Gran Bretaña.

(17) Claims Settlement Agreement between the United States of America and the Great Socialist People’s Libyan Arab Jamahiriya, August 14, 2008, p.4; el informe del CRS señalado también lo menciona, pero comete un error sobre la suma entregada a Libia y afirma que es “$300 billion” [300.000 millones de dólares]”.

(18) Andrew England y Simeon Kerr, “Libya hints at taking stake in BP,” Financial Times, July 5, 2010.

(19) Blanchard and Zanotti, “Libya: Background and U.S.,” Op. cit., p.5; vale la pena señalar que los dos investigadores citan a Asharq Al-Awsat, de propiedad saudí (el artículo específico citada es el siguiente: Khaled Mahmoud, “Gaddafi ready for Libya’s ‘Day of Rage,’” Asharq Al-Awsat, February 9, 2011) que de manera bastante interesante hace un vínculo entre las anteriores protestas libias el 17 de febrero de 2006 por las caricaturas publicadas en Dinamarca sobre el Profeta Muhammad que se transformaron en protestas contra Gadafi.

(20) Este hecho no justifica de ninguna manera ninguna violencia estatal en Libia, pero debe examinarse. También debe considerarse el contexto de la violencia en Libia.

(21) Blanchard and Zanotti, “Libya: Background and U.S.,” Op. cit., p.5.



© Copyright Mahdi Darius Nazemroaya, Global Research, 2011

Mahdi Darius Nazemroaya es especialista en Medio Oriente y Asia Central. Es Asociado Investigador del Centro de Investigación sobre la Globalización (CRG).

Fuente: http://www.globalresearch.ca/index.php?context=va&aid=24471

Leer Más......

Los jóvenes marroquíes lideran la marcha hacia el cambio

Asociación Tareas Solidarias Rebelión

El día 24 de abril, como todos los domingos más cercanos al día 20 de cada mes desde el 20 de febrero, Marruecos ha salido a la calle para reivindicar igualdad, dignidad, libertad y justicia. A nosotros, 8 españoles de la asociación Tareas Solidarias, nos han invitado las asociaciones con las que trabajamos en Marruecos a conocer y apoyar este movimiento saliendo como uno más a las calles de Tánger y viviendo una experiencia única e histórica.

La marcha ha comenzado en el barrio de Beni Makada en la plaza ya conocida como “la plaza del cambio” por ser el lugar elegido para iniciar las primeras manifestaciones. A partir de las 16h la gente ha ido llegando desde todos los lugares de Tánger para empezar sobre las 17h, marchando por diferentes barrios periféricos y terminando con un discurso hacia las 21h. Es difícil calcular la gente que se ha llegado a concentrar, aunque ha habido momentos en los que el principio y el fin no estaban al alcance de nuestra vista. La gran mayoría de los participantes eran jóvenes marroquíes, aunque hay que destacar muy positivamente la presencia de grupos de mujeres organizadas y sus familias.


La marcha, organizada y dirigida mayoritariamente por jóvenes, ha sido animada constantemente con eslóganes y canticos como “Marruecos libre” o “queremos una monarquía parlamentaria”. Como anécdota, pudimos leer varias pancartas en otros idiomas (español e inglés respectivamente) en las que ponían “Aquí no hay leyes, es el dinero quien manda” y “¿dónde están nuestros derechos?”. La organización junto a los ciudadanos, se han coordinado para mantener un comportamiento activo y pacífico, respetando los comercios y las calles y evitando cualquier tipo de altercado.

Finalmente queremos destacar la ilusión, la fuerza y la esperanza que mostraban los ciudadanos Tangerinos en la posibilidad de un cambio en sus derechos y su situación social. Desde este humilde grupo de españoles, creemos que es posible si esto continua así.

Leer Más......

miércoles, 27 de abril de 2011

El futuro es hoy, aquí y ahora

Mario Hernandez Rebelión

En el régimen capitalista, la civilización, la libertad y la riqueza hacen pensar en un rico harto de comida que pudre todo lo vivo y no deja vivir lo que es joven. Pero lo que es joven crece y alcanza la cumbre pase lo que pase.
Lenin

Las revueltas del norte de Africa, principalmente en Túnez y Egipto, y el papel jugado por la juventud, han puesto puntos suspensivos y alejado momentáneamente de los medios, a un proceso que podríamos calificar junto a Franco Berardi, “Bifo”, de “una suerte de insurrección europea” [1] .

Francia

Setiembre/Octubre 2010. La participación de los jóvenes en el movimiento de protesta por la reforma de las jubilaciones. Las manifestaciones reúnen a bachilleres del centro de las ciudades y de los barrios periféricos, a alumnos de diferentes edades, algunos muy jóvenes. También chicas y mujeres jóvenes enfrentándose a la policía. Una parte se moviliza claramente por el tema de las jubilaciones porque temen que el retraso en la edad de jubilación de sus mayores disminuya el número de puestos que quedarán para los recién llegados al mercado de trabajo, pero por encima hay una exasperación política, alimentada por el contraste entre los planes de salvamento de los bancos y los sacrificios requeridos a la población trabajadora. Se trata de una coalición de estudiantes con ferroviarios, empleados públicos y privados, profesores, empleados administrativos, estibadores del puerto, jubilados y desempleados.

“No queremos que nuestros padres se mueran trabajando, y nosotros no nos queremos secar bajo el sol buscando casa y trabajo”, dice un muchacho de 19 años. “Creían que en la economía inmaterial ya no había más trabajadores, ni manos curtidas, ni estudiantes en la miseria, ni responsabilidad colectiva a la hora de defender los derechos”, explica Arnauld, un estudiante de segundo año de química. “Somos la parte que los especialistas en estadísticas no tomaron en cuenta”, agrega Michel, otro estudiante de la misma materia. “Hay 25 % de desempleo entre los jóvenes, y el gobierno quiere hacer trabajar a la gente hasta los 70 años. ¡Una locura!”. “Por eso hemos venido con los sindicatos”, comenta Lucie, una joven recién ingresada a la Universidad. “Estamos hartos del cinismo, de la arrogancia del gobierno, de las injusticias permanentes, de ver cómo hacia arriba se viola la ley y hacia abajo nos ponen presos por cualquier insignificancia.” [2]

Detrás de la confrontación social por las jubilaciones, hay un fenómeno de proporciones dramáticas: la juventud francesa atraviesa un período negro con tasas de desempleo por encima de las normales, niveles de pobreza drásticos y exigencias carcelarias para encontrar una vivienda. “Juventud sacrificada”, “generación perdida”, “futuro sin trabajo y sin casa”, “juventud excluida”, los calificativos que retratan el panorama de los jóvenes en Francia son un catálogo del pesimismo que se instaló en las nuevas generaciones.

Los datos son un espejo de ese desaliento. En 2010, 24 % de los jóvenes activos estaba sin trabajo mientras que la tasa de pobreza entre los jóvenes de 20 y 29 años llegaba al 11 %. “Es una generación perdida”, dijo la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en un informe de agosto de este año. Si se comparan los niveles de desempleo mundiales con el francés, el calificativo no es exagerado: 13 % contra casi el 25 % en Francia.

El ingreso en la vida activa de los jóvenes es a menudo una carrera de obstáculos y humillaciones. “Nos plantean exigencias delirantes. Si buscamos trabajo nos requieren 5 años de experiencia, y si buscamos casa nos imponen salarios que sólo una persona que lleva años en la vida activa puede ganar. Es un círculo vicioso en el que la miseria gana cada vez más terreno”, cuenta Valentine, una informática de 23 años que lleva más de un año buscando trabajo y dos sin encontrar una vivienda. Estas dificultades “básicas” se incrementan en proporciones de exclusión demoledoras si el joven es hijo de inmigrados, tiene un nombre árabe o rasgos de otras latitudes. [3]

Reino Unido

El 10/11 más de 40 mil estudiantes y docentes de los sectores universitario y terciario recorrieron las calles de Londres y paralizaron el centro de la ciudad desde el mediodía hasta finales de la tarde para expresar su oposición a los recortes en el presupuesto educativo. La protesta, que fue convocada por el sindicato de estudiantes (NUS) y de docentes (UCU) fue la más grande en generaciones y dejó en claro que los trabajadores y estudiantes no están dispuestos a pagar una crisis que ellos no crearon. A pocos días de haber anunciado un drástico paquete de medidas de recorte, el gobierno dio a conocer su decisión de triplicar, a partir de 2012, los aranceles universitarios -ya inaccesibles para los hijos de los trabajadores y la población de menores ingresos-. El gobierno de la alianza conservadora liberal anunció su plan de recortar el presupuesto universitario en un 40% para el año 2014. Desde que se conoció la medida se han visto varias protestas de estudiantes universitarios, incluyendo ocupaciones de sedes universitarias. En Irlanda se vio una de las manifestaciones de estudiantes más numerosa de los últimos tiempos.

Los carteles decían: ¡Impuestos a los ricos, no a los estudiantes! ¡La educación es un derecho! ¡Que la crisis la paguen los capitalistas no los estudiantes! ¡Universidad para todos! ¡Educación gratuita, ya!

Pero los estudiantes no están solos. También en noviembre los trabajadores del subterráneo londinense y los periodistas de la BBC salieron a la lucha en una clara señal de oposición a los ataques implementados por sus patronales.

En el marco de los drásticos recortes en el sistema de beneficios y ayudas sociales y la pérdida de más de un millón de puestos de trabajo en el sector estatal, anunciados por el gobierno de la alianza conservadora-liberal, el desempleo juvenil alcanzó récord en el Reino Unido. La cifra total de adultos menores de 25 años que carecen de un puesto laboral ronda el millón de británicos, de acuerdo con datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) al cierre de noviembre último, publicados por el diario The Guardian.

En la actualidad, la tasa de desempleo juvenil alcanza el 20,3 %, el nivel más alto desde que comenzaron los registros en 1992.

Italia

En diciembre se votó la reforma de la Universidad. Así describe Marco Revelli a los jóvenes participantes de masivas movilizaciones de protesta: “Los protagonistas del martes (21.12) eran en gran parte menores de edad que no pueden decodificarse con ninguna de las claves del análisis político y social anterior. Son hijos del bienestar interrumpido, la generación «futuro cero». Pondré un ejemplo. En Turín, el Politécnico siempre había sido una escuela de élite y un lugar de orden. De él salían ingenieros formados dentro del horizonte de la gran empresa, que asumían sus códigos de funcionamiento. Eran los custodios del saber del gran capitalismo.

Pues bien, hoy el Politécnico es el más radicalizado. He oído hablar a investigadores e ingenieros y me parecía estar oyendo a los obreros de Mirafiori de los años ochenta. Fuerza de trabajo utilizada en un gran ciclo a la que de repente se priva de derechos y orgullo para arrojarla a un segmento periférico.

El otro día, delante del aula magna, había una pancarta que decía: «Nos habéis quitado demasiado, ahora lo queremos todo». Los recursos se han esfumado en los grandes circuitos financieros globales, están deslocalizados.” [4]

Puerto Rico y Wisconsin (EE. UU.)

Desde diciembre los estudiantes puertorriqueños cumplen una huelga contra el aumento del 300% de la matrícula universitaria. En un comunicado, los empleados de la UPR manifestaron su solidaridad con los universitarios en huelga, criticaron además el intento del gobierno de descalificar la huelga estudiantil y aseguraron en nota a la prensa que la intención de los alumnos es luchar por el "derecho de todos los puertorriqueños a una educación universitaria pública y el acceso al ofrecimiento de labores académicas e investigativas de calidad".

El sábado 26 de febrero, más de cien mil personas se concentraron en Madison, Wisconsin, para manifestarse en contra de la iniciativa del gobernador republicano Scott Walker para eliminar los derechos a la negociación colectiva de la mayoría de los empleados públicos. Se trata de la manifestación más grande acaecida en Madison desde la guerra de Vietnam. Decenas de miles de personas marcharon en manifestaciones de solidaridad en todo el país. En Nueva York, miles se reunieron en una concentración para "Salvar el sueño estadounidense" en las afueras de la municipalidad.

Multitudes de varios miles de personas también se congregaron en Chicago, Columbus, Los Ángeles y Denver, entre otras ciudades. En Wisconsin, centenares de manifestantes desafiaron las órdenes de la policía y durmieron en el interior de la sede del gobierno el domingo por la noche, a pesar de la orden de Walker de que abandonaran el lugar. La policía de la sede del gobierno decidió no hacer cumplir la orden de Walker luego de que centenares de activistas sindicales, estudiantes y manifestantes insistieron en permanecer allí.

El cineasta norteamericano Michael Moore se sorprendía de la participación estudiantil en las multitudinarias movilizaciones: “¿Qué les parece eso de que cientos de estudiantes de secundaria de Wisconsin hayan abandonando las clases hace cuatro días y hayan ocupado ahora el edificio gubernamental del Capitolio y sus jardines en Madison para pedir que el gobernador detenga sus ataques a los profesores y a otros trabajadores estatales?

Yo tengo que decir que es una de las cosas más extraordinarias que he visto en años. Ahora estamos viviendo uno de los momentos más asombrosos de la historia. Y este momento ha llegado porque todos los jóvenes del mundo han decidido que ya han tenido bastante.”

¿De vuelta a mayo del 68?

Era la pregunta que comenzaban a hacerse varios analistas de la rebelión juvenil en Europa [5] cuando aquélla pasó a alimentar el fuego de las revueltas árabes.

El mayo francés del 68 fue un levantamiento masivo en un país del capitalismo avanzado después de 20 años en condiciones de prosperidad imperialista. Este no es el caso por la actual crisis que atraviesan las economías avanzadas. En la actualidad la repartición de la renta nacional es el eje de la disputa. En el pasado lo fue el cambio o mantenimiento de las estructuras capitalistas en las fábricas, en la economía y en toda la sociedad burguesa. La huelga general contra los aparatos políticos y sindicales de la clase obrera y contra el poder fue la expresión de la ruptura entre la clase obrera y sus dirigentes. Tampoco la situación ha llegado a este punto.

Sin embargo, se tratan de imponer límites al acceso a los estudios superiores, reservando la Universidad a las futuras élites dirigentes. El adolescente que termina un aprendizaje profesional o estudios superiores no es esperado como fuerza de trabajo socialmente deseada. Los empleos son escasos y sin relación con el nivel cultural. Los estudios dejan de ser un derecho, son un privilegio. Un lujo que se paga. Se trata de contradicciones que no podrán ser reabsorbidas ni atenuadas por el sistema en los años por venir. De allí que la radicalización de la generación de menos de 25 años sea un fenómeno mundial y que sus temas sean convergentes, lo que indica el carácter fundamental y no circunstancial del movimiento. La dominación del capital se ha hecho inaceptable para el mundo juvenil.

Sumado a todo esto, las movilizaciones juveniles en Europa, el norte de Africa y América retoman una de las características centrales de Mayo del 68: la unidad obrero-estudiantil. Dimos varios ejemplos a lo largo del artículo. Nos interesa finalizar destacando los párrafos finales del manifiesto de los estudiantes de Rennes 2 a los trabajadores, parados y precarios de los países de la UE [6] :

“Ferroviarios belgas, siderúrgicos castellanos, portuarios marselleses, intermediarios griegos, interinos, precarios e indeseables de todas partes, vuestra lucha es la nuestra. En todas partes debemos responder de forma solidaria y coordinada a cada ataque de cualquiera de nuestros oligarcas nacionales más o menos cómplices de los comisarios y de los banqueros europeos.

Para detener las contrarreformas y los planes rigurosos, por la mejora de nuestras condiciones de vida, por una política de apertura y solidaridad con relación a los emigrantes y proletarios de todos los países, organicemos en todas partes comités de lucha, asambleas generales interprofesionales, brigadas de piquetes volantes coordinados paso a paso más allá de las fronteras. Bloqueemos la Europa del capital, desbloqueemos la Europa-fortaleza, librémonos de los Sarkozy, Merkel, Barroso ¡y Berlusconi! Huelga general indefinida! ¡Bloqueo económico!”.

* Este texto fue publicado anteriormente en Revista Topía – AÑO XXI – NUMERO 61 – ABRIL/JULIO 2011



--------------------------------------------------------------------------------

Notas

[1] Las luchas estudiantiles no son una explosión pasajera, sino el inicio de un largo período que marcará el próximo decenio, una suerte de insurrección europea. (Franco Berardi, Bifo, “Seré sintético”).

[2] Febbro, Eduardo, “Que vivan los estudiantes”, Página 12, 24.10.2010.


[3] Fuente : http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-153631-2010-09-23.html

[4] Fuente: http://www.megachipdue.info/tematiche/democrazia-nella-comunicazione/5289-la-prima-generazione-arrabbiata-del-post-crescita.html

[5] Ver Cueli, José, en http://www.jornada.unam.mx/2010/10/22/index.php?section=opinion&article=a07a1cul

Triana, Fausto, en Prensa Latina, 16.10.2010.

Febbro, Eduardo, en http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-154998-2010-10-15.html

[6] Ver http://juralibertaire.over-blog.com/article-adresse-aux-salaries-chomeurs-et-precaires-des-pays-de-l-union-europeenne-59671054.html

* El autor es sociólogo

Leer Más......

"Esperamos que su gobierno rectifique ese rumbo nada decoroso para el proceso bolivariano que tanto defendemos...




Rebelión


Señor presidente:

Este 23 de abril fue detenido en el aeropuerto venezolano de Maiquetía el ciudadano sueco, de origen colombiano, Joaquín Pérez Becerra. El comunicado oficial del gobierno que Usted encabeza, dijo que este periodista, y director de la agencia de noticias ANNCOL, era “requerido por los órganos de justicia de la República de Colombia, a través de INTERPOL, con difusión roja, por la comisión de los delitos de concierto para delinquir, financiamiento del terrorismo y administración de recursos relacionados con actividades terroristas.” Por lo cual se dispondría su extradición a Colombia.

Sorprendentemente, dos días después, el 25 de abril, el presidente de Colombia y ex ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, en declaraciones al diario El Tiempo de Bogotá, expresó: “el sábado llamé al presidente Chávez y le dije que un tipo muy importante para nosotros de las Farc llegaba en un vuelo de Lufthansa esa tarde a Caracas y que si lo podía detener. No titubeó. Lo mandó capturar y nos lo va a entregar.”

Ante esas declaraciones, queda una pregunta obligada: ¿El gobierno de Venezuela hizo un favor ilegal al gobierno de Colombia? Pues queda en evidencia que no existía la orden “roja” de la Interpol contra ese ciudadano. Si ella hubiera existido, Pérez Becerra habría sido detenido en Alemania, país donde embarcó hacia Venezuela, y que tiene uno de los mejores servicios de seguridad del mundo. O hubiera sido requerido por las autoridades de Suecia, donde reside, y ejerce una actividad periodística legal, así no guste al gobierno de Colombia, cuya persecución a periodistas críticos es bien conocida.


Presidente Chávez Frías:

Este lunes 25 de abril su gobierno envió a Pérez Becerra a Colombia. No se le permitió la visita de un abogado, ni la del cónsul de Suecia en Caracas. Así se violaron la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y tratados internacionales.

No es la primera vez que un revolucionario colombiano es deportado o extraditado a su país desde Venezuela. Otros ciudadanos, presuntamente miembros de las guerrillas del Ejército de Liberación Nacional, ELN, y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, han sido ya entregados manera expeditiva al gobierno colombiano, el cual, según Usted mismo lo repetía hasta hace pocos meses, es uno de los peores violadores a los derechos humanos en el mundo. Lo que es cierto, pues lo confirman centenares de informes de instituciones internacionales, incluida la ONU.

Entonces Usted puede imaginar muy bien qué suerte le puede esperar al ciudadano Pérez Becerra; y lo qué están viviendo los otros ciudadanos entregados por su gobierno a las autoridades colombianas.

Hasta el día de hoy, ningún gobierno europeo, y casi ninguno en el mundo, atendió los pedidos de extradición del gobierno colombiano contra sus opositores políticos, sean tildados como los tilde. ¿Por qué sí el de Venezuela?

Como bien sabe, hoy en día en Colombia y en muchos países, cualquier persona progresista es tildada de terrorista. Además, Usted y el Parlamento venezolano decretaron, en enero del 2008, que las guerrillas colombianas no eran organizaciones terroristas, sino combatientes revolucionarios. Así se les dio estatus político.

Si estas personas hubieran cometido delitos en el territorio venezolano, deberían ser sancionados por las leyes de este país, pero no entregados a unas autoridades que desde siempre han mentido, han manipulado la información, como Usted muchas veces lo ha dicho. Como Usted mismo lo ha sufrido.

Presidente Chávez Frías, esperamos que su gobierno rectifique ese rumbo nada decoroso para el proceso bolivariano que tanto defendemos, y que con orgullo queremos seguir mostrando,

Nos despedimos de Usted muy atentamente,

Primeras firmas:

Gilberto López y Rivas, antropólogo, México.

Hugo Moldiz Mercado, periodista, Bolivia.

Hernando Calvo Ospina, periodista, Colombia/Francia.

Santiago Alba Rico, escritor, España.

Carlos Fernández Liria, catedrático, España.

Sonia Brito, presidenta Asociación Derechos Humanos de La Paz, Bolivia.

Manuel Salgado Tamayo, catedrático y ex Vicepresidente del Congreso Nacional, Ecuador.

James Petras, sociólogo, Estados Unidos.

Michel Collon, periodista, Bélgica.

Carlos Aznarez, periodista, Argentina.

Renán Vega Cantor, catedrático, Colombia.

François Houtart, sociólogo, Bélgica.

Annalisa Melandri, periodista, Italia.

Mariana López de la Vega, filosofa, México.

Paco Calderón, sociólogo, España.

Narciso Isa Conde, coordinador de la Presidencia Colectiva del Movimiento Continental Bolivariano, República Dominicana.

Carlos Casanueva Troncoso, secretario general Movimiento General Bolivariano.

Cédric Rutter, Colectivo Investig'Action, Bélgica.

Ingrid Storgen, Colectivo por la paz en Colombia, Argentina

Jorge Beinstein, economista, Francia.

Aníbal Garzón, sociólogo, Bolivia.

Jorge Mendoza, sociólogo, Bolivia.

Geraldina Colotti, periodista, Italia.

Aline Castro, Red POR TI AMERICA, Brasil

Miguel-Ángel Aguilar, filósofo, México.

Carlos Figueroa Ibarra, catedrático, México.

Chaterine Hernández, periodista, España.

Antonio Mazzeo, periodista, Italia.

Fulvio Grimaldi, periodista, Asociación de Amistad Italia-Cuba, Italia

Sandra Paganini, docente, Asociación de Amistad Italia-Cuba, Italia.

Fetera Flores, colectivo de Base, Argentina.

Cristina Castello, escritora, Argentina/Francia.

Dax Toscano Segovia, periodista, Ecuador.

Juan Carlos Monedero, catedrático, España

Hassan Dalband, catedrático, México.

Xiomara Pérez Díaz, artista, Venezuela.

Héctor Seijas, escritor, Venezuela.

Ender Cepeda, pintor, Venezuela.

Asociación Bolivariana de Asuntos Humanitarios PATRIA ES SOLIDARIDAD, Venezuela.

Movimiento Continental Bolivariano, Ecuador.

Mario Casasús, periodista, México.

Asociación Nacional de Abogados Democráticos, México.

Observatorio Nacional de Prisiones, México.

Agencia Bolivariana de Prensa, Ecuador.

Giorgio Trucchi, periodista, Italia.

Movimiento Guevarista Tierra Y Libertad, Ecuador.

Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos, México.

Fundación Diego Lucero, México.

Aurora Tumanischwili, C olectivo Amigos de la Paz en Colombia, Argentina.

Guillermo López, Colectivo Amigos de la Paz en Colombia, Argentina.

Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Víctimas de Violaciones de Derechos Humanos, México.

Red Universitaria de Monitores de Derechos Humanos, México.

Federación de Trabajadores Libres de Pichincha, Ecuador.

Movimiento José Peralta, Ecuador.

Juan Carlos Vallejo, escritor, Colombia/Estados Unidos.

Alejandro Rodríguez, Bolivia.

Álvaro Zuleta, economista, Bolivia.

Raúl Prada, sociólogo, Bolivia.

Oliver Villar, catedrático, Australia.

Guido Piccoli, periodista, Italia.

Xarlo Etchezaharreta, educador, Francia.

Lourdes García-Larqué, sindicalista, Australia.

Alejandro Dausá, periodista, Bolivia.

Víctor Vacaflores, economista, Bolivia.

Centro de Derechos Humanos Coordinadora 28 de Mayo, México.

Elena A. Romano, Colectivo Amigos de la Paz en Colombia, Argentina.

Marcela Pérez, Colectivo Amigos de la Paz en Colombia, Argentina.

Asociación de Derechos Humanos del Estado de México, México.

Asociación para la Defensa de los Derechos Humanos y Equidad de Género, México.

Leer Más......

“La gran apuesta de Estados Unidos son los Hermanos Musulmanes”


Pascual Serrano Rebelión

El analista Samir Amin disecciona la situación de Egipto

La presencia en la localidad gallega de Pontevedra del experto en política internacional y en el mundo árabe Samir Amin con motivo de la XXVIII Semana Galega de Filosofía organizada por el Aula Castelao, nos ofreció la oportunidad de repasar los convulsos acontecimientos de los últimos meses en esta región. Desde 1980 preside el Foro del Tercer Mundo y el Foro Mundial de las Alternativas. Su trabajo se caracteriza por la defensa de una voz común para los países periféricos y desfavorecidos y la condena del modelo de globalización neoliberal que no deja de incrementar las desigualdades sociales a nivel local e internacional. Nacido en Egipto y recién llegado de este país, nos pudo ofrecer su interpretación y análisis del desarrollo de la rebelión egipcia, el repaso a los diferentes actores y los intereses y estrategias de las diferentes potencias internacionales.


Con el anterior presidente Hosni Mubarak ya fuera del poder y en manos de los jueces, un gobierno provisional al frente del país, y un ejército jugando un papel excepcional, la primera incógnita es cómo se presentan la correlación de fuerzas y quiénes son los actores del tablero egipcio.


En opinión de Samir Amin, la naturaleza y composición del movimiento de rebeldía que se produjo en Egipto lo integran varios elementos diferenciados. En primer lugar, y con la mayor fuerza, unos jóvenes politizados y organizados que alcanzan perfectamente el millón pero que no tienen partido ni organización definida. A ellos se suman desde el primer día los comunistas, quienes a pesar de la represión sufrida bajo el régimen de Mubarak tienen una fuerza y presencia importante. A pesar de la diferencia ideológica, se crea una sintonía y unidad de acción importante entre los jóvenes y los comunistas que se basa en la reclamación de democracia para el país. Pero no una democracia que se limite a unas elecciones libres, sino una democratización de la sociedad, es decir, una democracia social, no necesariamente socialista, que reniega, tal y como se aprecia en sus slogans y pancartas, de las instituciones financieras internacionales como el BM y el FMI. Piden nacionalización de los sectores estratégicos y el fin de los procesos privatizadores. Igualmente, en el marco internacional exigen una política exterior independiente respecto a Israel y Estados Unidos, no olvidemos que Mubarak fue uno de los leales aliados de estos países en el mundo árabe. Sobre este colectivo cae el principal coste de víctimas por la represión, para empezar unos trescientos muertos el 25 de enero.

El siguiente grupo lo integran lo que se denominaría la clase media democrática. Se trata de una clase media integrada por profesionales liberales y técnicos. Sus reivindicaciones son de carácter democrático sin replantearse la economía liberal ni posicionarse como anticapitalistas.

Por último, a la masa en rebeldía se le sumarían los pequeños campesinos cuyas tierras se ven amenazadas por los grandes propietarios, colectivos obreros -muy bien organizados- que han logrado consolidar un sindicalismo independiente a partir de las huelgas de 2007 y otros sectores marginales y populares de difícil ubicación ideológica. Todos ellos lograron sumar quince millones de personas movilizadas en la calle.

Frente a esta masa que pide cambios, se encuentra lo que Samir Amin denomina el bloque de la reacción. En él se integran una burguesía económicamente solvente, proestadounidense, con gran capacidad de consumo. Son decenas de miles y controlan el sistema productivo del país y los medios de comunicación. En este mismo bloque reaccionario se encuentran los campesinos ricos, beneficiarios del modelo neoliberal que han logrado ir apropiándose de los recursos del pequeño campesinado. Este sector ha desarrollado una clase media adinerada, que son los hijos de estos campesinos ricos. Este bloque de la reacción es la base social del islamismo político, al igual que en Occidente históricamente formaran la base de la democracia cristiana. Así, las instituciones y dirigencias islamistas de Egipto cumplen el mismo papel reaccionario que históricamente ha cumplido la Iglesia católica en Occidente.

Uno de los instrumentos del bloque de la reacción es el control del ejército, hoy con un papel fundamental a través del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas que tutela la evolución de los cambios en Egipto. Se trata de un ejército que se ha desarrollado a la sombra de la corrupción generada por el dinero procedente de Estados Unidos, que no tenía como objetivo modernizar las fuerzas armadas sino corromper al estamento castrense y conseguir que se incorporara a la burguesía capitalista.

En el bloque de la reacción encontramos también a los partidos burgueses. Si bien los jueces disolvieron el partido de Mubarak, el PND, sus miembros se han ido reorganizando en varios partidos más o menos desconocidos, con líderes apenas significados pero que cuentan con el apoyo y el dinero de Estados Unidos y de la Unión Europea. Se trata de ayudas, según señala Amin, procedentes tanto de la derecha europea como de los partidos socialdemócratas, no olvidemos que el PND, antes de su disolución, pertenecía a esta internacional. Otra potencia económicamente solvente que está financiando a estos partidos reaccionarios es Arabia Saudí.

Pero quizás el actor que merece una especial atención, y sobre el cual la opinión de Samir Amin resulta muy clarificadora, son los Hermanos Musulmanes. Aparentemente opositores históricos a Mubarak, fueron tolerados por su régimen y nunca fueron una verdadera oposición que promoviera cambios sustanciales a la dictadura. Creados en 1927 por los británicos, Amin recuerda que ya apoyaron las dictaduras fascistas de Egipto antes de Nasser. Su papel siempre ha sido de apoyo a la reacción y nunca a favor de las luchas populares, las diferentes movilizaciones y huelgas obreras anteriores a la rebelión siempre contaron con la oposición de los Hermanos Musulmanes que no dudaron en ponerse al lado de Mubarak a la hora de poner en marcha la represión. Samir Amin aclara que se trata de un partido de corte totalmente fascista, con un líder a semejanza de un führer, el único con derecho a la palabra, el resto de la militancia debe acatar sus órdenes tal y como establecen sus estatutos. Los cuadros de la organización son reclutados de entre la clase media burguesa y los campesinos ricos. Logran ganarse a algunos sectores empobrecidos a través de sus políticas de caridad y no les falta el dinero de Arabia Saudí. Los Hermanos Musulmanes poseen una milicia que reclutan entre el lumpen, lograron la excarcelación de 17.000 delincuentes comunes a los que proveyeron de armas y dinero para que hicieran el trabajo sucio y participaran en la represión contra los manifestantes al lado de la policía.

El apoyo internacional del bloque reaccionario procede de Estados Unidos, Israel y Arabia Saudí. Estados Unidos no reconocerá su estrategia de apoyo al islam político, aparentará que lo teme pero, de esta forma, ellos legitiman su guerra permanente contra el terrorismo, que en realidad tiene otros objetivos: entre ellos, el control militar del planeta destinado a reservar para los Estados Unidos, Europa y Japón el acceso exclusivo a los recursos. Al mismo tiempo le permite alimentar la islamofobia entre la opinión pública occidental y de esta forma el rechazo a los inmigrantes. En el caso de Israel, el bloque reaccionario egipcio le satisface porque no se replantea el dominio y la ocupación palestina, y Arabia Saudí porque necesita una Egipto sumiso y poco independiente para poder tener la hegemonía en la región. Arabia Saudí siempre será enemiga de un Egipto independiente y antiimperialista.

El bloque reaccionario se consolida tras el derrocamiento de Mubarak por lo que Samir Amin no duda en calificar de golpe de Estado. Obama, el primer ministro israelí y el rey saudí apoyaron a Mubarak hasta el último momento. Sin embargo, la inteligencia del ejército le hizo vislumbrar la imposibilidad de mantener el régimen sin mancharse con una sangrienta represión y optaron por el golpe de Estado. A Estados Unidos y Europa no les quedó otra opción que aceptarlo e intentar dirigir la transición.

Cómo se vislumbra esa transición es la incógnita que le planteamos a Samir Amin. En su opinión, el gobierno provisional de transición que hoy está al frente de Egipto está formado por un equipo de tecnócratas mediocres y reaccionarios sin capacidad de liderar cambios políticos. Su dedicación prioritaria es manejar pequeñas concesiones al movimiento popular para lograr su división. Y su estrategia a medio plazo es la celebración de unas elecciones rápidas, con una transición breve que no permita dar tiempo a que el movimiento popular se organice y prepare y, de esta forma, lograr legitimar un gobierno de reacción. Es por ello que Obama ya ha dado el certificado de demócratas a los Hermanos Musulmanes, sabedor de que, con su poder, dinero y organización, hoy son sus grandes aliados para un Egipto neoliberal que reprima cualquier movimiento de izquierdas. Por su parte, la izquierda, en opinión de Samir Amin, apuesta por una gran alianza de partidos, sindicatos independientes, organizaciones campesinas, jóvenes independientes, etc... que ya está en marcha como una Alianza Democrática Nacional Popular y que cuenta con comités locales en todos los barrios. Para garantizar una verdadera transición democrática se requiere que sea larga y con un régimen de libertades que permita la maduración y desarrollo de las diferentes opciones políticas. Mientras tanto se requiere un gobierno de transición que incluya al mayor espectro político y social: jóvenes, comunistas, clase media. Las elecciones se podrían celebrar entonces en torno a septiembre-octubre de 2011.

www.pascualserrano.net

Leer Más......

martes, 26 de abril de 2011

La cobardía es símbolo de traición

Dax Toscano Para Kaos en la Red

Julius Fucik, militante comunista asesinado por el nazismo, escribió en su obra “Reportaje al pie del patíbulo” que: “Cuando la lucha es a muerte; el fiel resiste; el indeciso renuncia; el cobarde traiciona…, el burgués se desespera, y el héroe combate”.

Chávez ha renunciado a estar junto a los revolucionarios para ponerse de lado de la oligarquía santanderista colombiana. La historia y los pueblos que luchan con el ejemplo de Bolívar no olvidarán la afrenta que el presidente Chávez, otrora radical y consecuente con las ideas que profesaba, hoy está cometiendo contra un luchador y revolucionario como Joaquín Pérez Becerra.

El día sábado al arribar a Venezuela, en el aeropuerto de Maiquetía, el fundador y director de la Agencia por la Nueva Colombia, fue detenido por los servicios de inteligencia de ese país. De inmediato, el gobierno “¿bolivariano?” emitió un comunicado en el cual dio a conocer sobre ésta detención, señalando que Joaquín Pérez Becerra estaba solicitado por Interpol y que tenía una circular roja por la supuesta comisión de los delitos de concierto para delinquir, financiamiento del terrorismo y administración de recursos relacionados con actividades terroristas.


Los victimarios transforman a sus víctimas en lo que ellos son.

Militante de la Unión Patriótica, organización política que sufrió el aniquilamiento de sus miembros por parte del Estado colombiano y sus fuerzas militares y paramilitares, Joaquín partió al exilio y se radicó en Suecia, país donde obtuvo la ciudadanía y en el cual vive junto a su familia.

Su delito es haber hecho un periodismo digno, implicado con la causa de los pueblos y de la revolución latinoamericana. Su delito ha sido el de jamás hacer suyo el discurso de los poderosos, de la oligarquía colombiana, del imperialismo y de la industria de la mentira a través del cual se ha descalificado a la insurgencia colombiana.

Es lo que Chávez no ha aprendido. Su cobardía lo ha llevado a traicionar a un hermano de lucha, para ponerse de rodillas ante el asesino Juan Manuel Santos, aquel que cuando fuera Ministro de Defensa dio la órden, conjuntamente al narcoparamilitar de Uribe, de bombardear el campamento de Angostura en territorio ecuatoriano.

La política internacional de Chávez está supeditada a sus intereses muy particulares. Ataca verbalmente al imperialismo, cada vez con menos contundencia que cuando lo hacía en sus inicios, ya ni siquiera habla de la oligarquía santanderista, como si Santos fuera un bolivariano, mientras en la práctica demuestra ser inconsecuente con lo que expresa.

Chávez no ha escatimado servir a gobiernos reaccionarios y de colaborar con sus políticas represivas. Ayer lo hizo con España, para complacer a Zapatero y al rey, asustado frente a las declaraciones de un juez de la Audiencia Nacional que pretendió implicar a su gobierno con las FARC-EP y con ETA. Por eso el régimen emprendió la persecución a ciudadanos vascos residentes en Venezuela y a la expulsión del internacionalista Walter Wendelin.

Ahora, como el propio Santos ha declarado, “no ha titubeado” para prestar sus buenos servicios para la captura de Joaquín Pérez Becerra.

Chávez ha claudicado. Ahora su colaboración es con el régimen fascista colombiano, ya no con la lucha de los pueblos. El miedo lo ha vencido, más preocupado de ganar unos cuantos votos para no seguir perdiendo respaldo popular frente a las elecciones presidenciales de 2012, debido a las políticas contradictorias de su régimen que no se decide a golpear definitivamente a los intereses de la burguesía venezolana, a combatir a la corrupción, a la burocracia, a la boliburguesía y a luchar en forma efectiva por la victoria del socialismo en la República Bolivariana de Venezuela.

Chávez ha cedido mucho terreno, producto de su cobardía.

Ante las presiones del gobierno uribista se intento boicotear la Escuela de Formación Política Manuel Marulanda Vélez en el año 2009. Chávez llamaba hermano a Uribe, se abrazaba con él, se tomaba fotos hasta que el paraco le dio otro zarpazo. Luego entabló amistad con Santos quien le impuso sus condiciones para aceptarle como amigo. Chávez no rechistó y se sometió a las imposiciones de Juan Manuel, su nuevo hermano. Mientras, la política diplomática incoherente del presidente Chávez que mandaba tropas a la frontera colombiana, para luego darse la mano con sus enemigos, a los que él ve como sus amigos y hermanos, cada vez más se alejaba de la lucha de los pueblos y de la práctica que debe caracterizar a todas y todos los revolucionarios: el internacionalismo.

Chávez está confundido: no es internacionalista el que ayuda simplemente a gobiernos, incluso a los oligárquicos; no es internacionalista el que pone por encima a los intereses estatales, por los de la lucha revolucionaria de los pueblos; no es internacionalista el que solo mira por sus intereses particulares para garantizar su permanencia en el gobierno, dejando de lado la ética que debe caracterizar a las y los revolucionarios y que implica ponerse siempre del lado de los débiles y no de sus opresores.

Muy poco ha asimilado Chávez las lecturas de Gramsci, del Che, de Trotsky que dice haber realizado.

Que distinto este Chávez cobarde y claudicador, al Comandante bolivariano que pedía el reconocimiento como fuerzas beligerantes dentro del conflicto colombiano para las guerrillas del ELN y las FARC-EP. De eso ya no queda nada. Hoy, en cambio, entrega a guerrilleros para satisfacer a su amigo Santos.

Da pena, a la vez que causa dolor.

La Revolución bolivariana seguirá contando con el apoyo decidido de otros pueblos hermanos. Con Chávez, por ahora, la relación ha llegado a un final triste.



Patria Grande, 25 de abril de 2011



Leer Más......

  ©Template by Dicas Blogger.